Era una tarde de verano de los años 70 cuando una grupo de
veteranos de guerra: Paúl quien era experto en los Curtiss P40, Juan en los
Grumman Bearcat, David en los Albatros DV, emprendieron una travesía por su gusto
por la aviación viajando en unos de los primeros aviones comerciales de la
empresa Boeing 747 de propiedad de una de sus grandes fans Licha que era una
joven piloto poco experimentada, viajaban de EEUU hacia Alemania para unirse a
la convención mundial de Aviadores y de la evolución de los aviones en la
historia.
Pero ellos no sabían lo que estaba por ocurrir ya que la
malvada Katherine quien era experta en astronomía y en ondas de
radio o radiación electromagnética, puso en marcha su plan dejar a fuera a
todos los satélites para que todos los aviones del mundo que usaban esta
tecnología cayeran y nunca más pudieran volar.
En ese momento puso en marcha su plan y todos los aviones del
mundo comenzaron a sufrir problemas en sus sistemas de navegación, incluido el Boeing 747 donde
iban los experimentados pilotos, lo cual los llevó a realizar un aterrizaje
forzoso cerca de un destacamento militar.
En el destacamento les pusieron al tanto de lo que ocurría
(que todo los sistemas de navegación de los aviones modernos en esas épocas que
funcionaban con los satélites no respondían), y en conversación entre los
experimentados pilotos surgió la idea de utilizar los aviones que combatieron
en la primera y segunda guerra mundial que se encontraban ahí como reliquias ya
que estos no usaban los satélites para poder volar hacia el lugar donde
funcionaba el aparato que dejaba fuera a los satélites.
Pablo al mando del Grumman Bearcat armo la táctica de combate
poniéndose de acuerdo con Paul que volaría Curtiss P40 usado en la segunda
guerra mundial iban a ir atrás del Albatros DV ya que este no era muy buen
avión y seria más de conejillo de indias para llamar la atención del enemigo y
así poder actuar los aviones de USA para poder destruir el aparato.
Al llegar al lugar se encontraron con un edificio con una
infraestructura demasiado fuerte casi imposible que la artillería de los
aviones de USA pudieran atravesar, entonces Albatros se ofreció a impactarse
contra la parte frontal del edificio para destruirlo.
Albatros dirigido por David estaba cayendo en picada hacia el
objetivo donde se despidió diciendo que
a pesar de la tragedia siempre va a haber una segunda oportunidad y que en la
unión esta la fuerza cuando se escuchó un gran estruendo y se vio una gran
explosión. La abertura quedó abierta logrando destruir el aparato y recuperando
los satélites.
Meses después se condecoró a tan valientes soldados en una
gala mundial entregando como premio el Tornillo aéreo de Dan Vinci que daría la
pauta para la creación de todos los aviones que existen en el presente y que el
hombre si podía volar.
FIN
0 comentarios:
Publicar un comentario